La ecografía de tiroides es una prueba de imagen por ultrasonidos, indolora y no invasiva. Permite evaluar el estado de la glándula tiroides y detectar posibles anomalías como nódulos, inflamaciones o alteraciones en su tamaño y estructura.
¿Cuándo es recomendable?
La ecografía tiroidea está indicada cuando existen sospechas de alteraciones en la glándula tiroides, ya sea por síntomas clínicos o antecedentes médicos. Se recomienda en los siguientes casos:
- Presencia de bultos o nódulos en el cuello.
- Inflamación o aumento del tamaño de la tiroides (bocio).
- Diagnóstico o seguimiento de hipotiroidismo o hipertiroidismo.
- Evaluación de cambios en la voz o dificultad para tragar.
- Control de nódulos tiroideos detectados previamente.
- Seguimiento tras tratamiento de patologías tiroideas.
Síntomas que pueden indicar la necesidad de una ecografía tiroidea
Si experimenta alguno de los siguientes síntomas, un estudio ecográfico puede ayudar a identificar la causa y orientar el tratamiento adecuado:
- Bultos o hinchazón en la parte anterior del cuello.
- Cambios inexplicables en el peso corporal.
- Fatiga o sensación de cansancio constante.
- Palpitaciones o alteraciones en el ritmo cardiaco.
- Intolerancia al frío o al calor.
- Piel seca y cambios en la textura del cabello.
- Dificultad para tragar o sensación de opresión en la garganta.
- Cambios en el estado de ánimo, ansiedad o depresión.
Resultados e informe al momento
Tras realizar una ecografía de tiroides, el especialista redacta un breve informe que incluye imágenes de la prueba y observaciones sobre la prueba. El informe se redacta en el momento y puede requerir 5-10 minutos de espera. Se entrega en papel impreso o en formato digital.
Especialistas
- Dr. José Quirante
- Dr. Alberto Alomar
Horario
- Martes y viernes de 12:30 a 15:30
- Otros turnos disponibles (consultar)
Precio
La ecografía de tiroides tiene un precio de 85€.
Preguntas frecuentes
¿Necesito volante o prescripción médica para hacerme una ecografía de tiroides?
No. La mayoría de pacientes vienen remitidos por su médico, aunque cualquier persona puede venir por su cuenta y solicitar una ecografía. Aceptamos pacientes que vienen por privado, o vienen por seguro médico.
¿Es dolorosa?
No. La ecografía tiroidea es indolora y no tiene efectos secundarios. El cabezal del ecógrafo funciona emitiendo ultrasonidos y sólo requiere aplicar cierta presión sobre el cuello durante la exploración.
¿Cuánto tiempo dura una ecografía de tiroides?
Depende del paciente a tratar y de la pericia del especialista. Una ecografía de tiroides más la redacción del informe suele tardar un total de 15-30 minutos.
¿Cómo se realiza una ecografía tiroidea?
La ecografía tiroidea se realiza en una consulta habilitada con un ecógrafo. El paciente se recuesta en una camilla con el cuello ligeramente extendido, mientras el especialista aplica un gel conductor en la piel para mejorar la transmisión de las ondas de ultrasonido. A continuación, se desliza un transductor sobre el cuello, capturando imágenes detalladas en tiempo real. La prueba dura entre 10 y 20 minutos y no requiere preparación previa. Una vez finalizada la exploración, el médico especialista analiza las imágenes y redacta un informe para determinar si existen alteraciones en la tiroides.

¿Qué patologías o enfermedades puede detectar una ecografía de tiroides?
- Nódulos tiroideos: Bultos en la glándula tiroides, que pueden ser benignos o, en algunos casos, malignos.
- Bocio: Aumento anormal del tamaño de la tiroides, causado por deficiencia de yodo o trastornos hormonales.
- Tiroiditis: Inflamación de la tiroides, incluyendo la tiroiditis de Hashimoto (autoinmune) o la tiroiditis subaguda (viral).
- Quistes tiroideos: Pequeñas cavidades llenas de líquido en la tiroides, generalmente benignas.
- Cáncer de tiroides: Presencia de masas sospechosas que pueden requerir una biopsia para su diagnóstico definitivo.
- Hipotiroidismo o hipertiroidismo estructural: Cambios en la estructura de la tiroides que pueden afectar su función hormonal.
- Calcificaciones tiroideas: Depósitos de calcio en la glándula, asociados a ciertos tipos de nódulos o tumores.
- Alteraciones en los ganglios linfáticos cercanos: Inflamación o cambios en los ganglios del cuello, que pueden sugerir infecciones o enfermedades más serias.
¿Esta prueba necesita preparación?
Esta prueba no requiere ninguna preparación especial.